Subido a un improvisado escenario frente al Ministerio de Trabajo de la Nación, el dirigente sindical Pablo Micheli unificó el reclamo de miles de personas que se movilizaron ayer en todo el país para exigir la personería gremial de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) y pedir mejoras salariales e impositivas.
"Rechazamos la unilateralidad del Gobierno para fijar el monto de las asignaciones familiares", entonó furioso Micheli, a quien el Gobierno hizo a un lado cuando negoció con el sindicalismo y los empresarios la suba del salario mínimo, vital y móvil. Aquella vez, la Casa Rosada acordó con la CTA que conduce Hugo Yasky y con la cúpula de la CGT.
Tanto Yasky como Hugo Moyano fueron invitados a la movilización de ayer, pero ninguno de los dos aceptó la convocatoria realizada por la CTA disidente.
"Esos protestan cuando no los tienen en cuenta, pero van a poner los huevos en Olivos", criticó Micheli a Moyano y Yasky por su cercanía con el Gobierno. Y agregó: "La personería gremial de la CTA no se consigue con palmaditas en la espalda del ministro de Trabajo sino que se consigue con la lucha".
La protesta de la CTA se extendió ayer por todo el país y tuvo otros sectores adherentes, como la Corriente Clasista y Combativa, que pidió por el esclarecimiento de la muerte de sus militantes por la toma de tierras en Ledesma.
Hubo movilizaciones en Chaco, Río Negro, Entre Ríos, Jujuy, Mendoza, San Juan, Misiones, Tucumán y en Rosario. En total, protestaron unos 100.000 trabajadores, según informó la CTA.
En Buenos Aires, Micheli exigió frente al Congreso la aplicación del 82% móvil a los jubilados. El reclamo fue simbólico y colorido: globos celestes y blancos con mensajes de los jubilados a Cristina Kirchner se perdieron en el cielo.
Desde allí, los manifestantes se dirigieron a la sede de la cartera laboral, donde Micheli apuntó sus críticas al ministro Carlos Tomada y a la Presidenta. Víctor De Gennaro, uno de los fundadores de la central que nació en 1992 para combatir al sindicalismo que estaba alineado con el menemismo, respaldó la marcha, aunque no participó porque es candidato a diputado nacional por el Frente Amplio Progresista.
A un año de las frustradas elecciones, se evidenció ayer como nunca la fractura de la CTA..
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