José Pedraza y Gerardo Martínez

Dos representantes de la burocracia sindical con el mismo sistema de amedrentamiento y represión a los trabajadores a través de sus patotas. En realidad están defendiendo los verdaderos intereses personales que esconden: sus relaciones comerciales con las terecerizadas; la explotación de los trabajadores; la precarización laboral y negocios millonarios a costa de los salarios de los trabajadores.

El mismo "modus operandi", contratar barrabravas, pistoleros, y mano de obra desocupada para golpear, amenazar y matar a los que piensan distinto y a los que quieren defender los derechos de los trabajadores. Funcionarios policiales cómplices que "liberan las zonas" y dejan actuar impunemente a la patota.

Los trabajadores argentinos y fundamentalemente los de la construcción estamos siendo, no sólo testigos, sino protagonistas de un nuevo tiempo donde la libertad y la democracia sindical deben ser un derecho pleno, donde la pluralidad ideologica no sea una utopia y donde un nuevo movimiento sindical surgido de las bases le de a los trabajadores la posibilidad de elegir y ser elegidos.

Por el fin de la violencia, el fin de las patotas, el fin de la impunidad de los Pedraza y los Martínez.

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